ORACIÓN CON EL CORAZÓN II

ORACIÓN CON EL CORAZÓN II

Rosa Antón Franco

Queridos compañeros de la Escuela de Teología. Quiero seguir haciéndoos partícipes de los mensajes de la Reina de la Paz. Ya os he contado que una de sus peticiones es que oremos con el corazón.

El Padre Slavko Barbaric, franciscano destinado durante años en Medjugorje, falleció el 24 de noviembre 2000 a las 15,30 horas. Después de haber terminado la oración del Vía Crucis, que habitualmente dirigía cada viernes en el Krizevac con los fieles de la parroquia y los peregrinos. Repentinamente sintió dolor, se sentó en una piedra, rápidamente cayó al suelo, perdió conocimiento y entregó su alma al Señor.

Monte Krizevac de lejos e imagen de la subida del Vía Crucis

Este franciscano, muy querido en la parroquia de Medjugorje, escribió un precioso libro titulado ¡ORA CON EL CORAZON!

Es difícil encontrar en España este libro, no se encuentra en librerías por lo que deseando haceros partícipes de lo que yo considero como un tesoro de oración, en días sucesivos iré mandando partes de su contenido esperando que os sirva de ayuda. Hoy voy a comenzar con la presentación del libro para ponernos en situación.

Medjugorje es una pequeña aldea croata en Bosnia-Herzegovina, donde viven unas cuatrocientas familias que se dedican al cultivo de la vid y del tabaco. Es una llanura rodeada de colinas y montañas y los alojamientos que se encuentran son realmente sencillos.

A pesar de los los obstáculos impuestos en su momento por el gobierno comunista de la desaparecida Yugoslavia, millones y millones de peregrinos han acudido a este lugar desde el comienzo de las apariciones en 1981.

Muchos han encontrado allí la salud del alma y han cambiado sus vidas, y es que Medjugorje es un lugar totalmente consagrado a Dios y se ha transformado en un importante centro de la espiritualidad cristiana al amparo de la presencia de la Madre de Jesús, la Virgen María.

En el Vacitano se formó una comisión especial para estudiar estos acontecimientos y todos los seguidores de estas apariciones marianas tenemos la seguridad que su pronunciamiento, será favorable.

Lo más importante del mensaje que Medjugorje quiere dar al mundo es LA PAZ. Pero no la paz como ausencia de guerra, sino más bien de la paz que nace del corazón. Si el hombre tiene paz en su corazón, también en el mundo habrá paz.

Atrapado por la inquietud del racionalismo y por la agitación que la vida moderna proporciona, el hombre actual ha olvidado cómo alcanzar este don que es precisamente el primer fruto mesiánico de la presencia de Jesucristo entre nosotros. Cuando apareció tras la resurrección en medio de sus discípulos, lo que dijo fue "La paz esté con vosotros".

En medio de la confusión aparece María y nos dice que el camino para obtener la paz del corazón es: conversión, oración y ayuno.

Este sencillo pueblo como en Guadalupe, La Salette, Lourdes y Fátima, es tan solo un sitio geográfico escogido por Dios para las manifestaciones de la Santísima Virgen María. Sin embargo lo que busca la Virgen es encontrar alojamiento0 permanente en nuestro corazón, de tal manera que todos podemos vivir la invitación de María sin tener que ir a Medjugorje. Es en nuestro corazón donde la Madre de Dios quiere hacerse presente para llevarnos a vivir la fe con el corazón y a experimentar la resurrección que Jesucristo nos ofrece.

En relación a la oración las catequesis de los sacerdotes franciscanos a cargo de la Parroquia de Medjugorje, sacamos algunas conclusiones:

- Que la oración es la llave que abre los corazones, quien ora puede abrir cualquier puerta. La oración es el puente que nos permite pasar de una orilla a la otra. Es la gracia que nos ayuda a entendernos unos con otros. Es el alimento indispnesable para tener una fe viva en Dios.

- Que Orar con el corazón es un don del Espíritu Santo y debemos pedirlo. La oración con el corazón cambia a la persona, a través de la acción del Espíritu Santo. La oración del corazón proporciona descanso al alma y la hace bella como una flor. Sana al enfermo y da la gracia de aceptar cualquier sufrimiento como fuente de redención. Convierte a los que odian y hacen las guerras y promueven la violencia. Mueve a los estadistas a comprometerse n la lucha por la paz que este mundo tanto necesita. Lo dispone a uno a orar al pie de la Cruz y a poner el valor divino en las cruces personales de cada día.

Si se lo permitimos, el Espíritu Santo renovará para nosotros las formas tradicionales de orar y les dará vida. Nos enseñará, qué efectivo es el rezo del Santo Rosario si lo rezamos bien - si lo rezamos con el corazón-, para traer la paz al mundo; para convertir a los pecadores; para vencer las asechanzas del demonio y advertir las calamidades que él quiere causar a la Iglesia.

El libro "¡Ora con el corazón!" lo escribió el padre Barbaric con el propósito de ayudar a los peregrinos que visitan Medjugorje, pero en él se descubre un alcance universal y que despierta en cualquiera que lo lea el deseo de aprender a orar con el corazón.

Las oraciones que el Padre Salvko propone, son extraordinariamente bellas. Nacen del conocimiento profundo y vivido de las Sagradas Escrituras, al tiempo que lo conjuga con el amor que mana de los mensajes de la Santísima Virgen María. No son oraciones retóricas, sino oraciones sencillas que nacen sincera y espontáneamente del corazón de un sacerdote que rezaba con el corazón.