martes, 16 de junio de 2015

La Posada del Silencio nº 100, curso VI


La posada del silencio

El texto de hoy

La posada del silencio

Desnudo salí del vientre de mi madre y desnudo volveré a él

El amor no siempre nos enriquece, el amor lo primero que hace es empobrecernos, lo entregamos todo. Todo ha de ser ofrecido y entregado a Dios. Para él son todas nuestras cosas, toda nuestra vida.

En el silencio se aprende este despojo, se aprende a desapropiarse. El silencio es el ofrecimiento de toda nuestra vida a Dios.

Ahí en el desapropio existirá un alivio y una epifanía de Dios. Dios empezará a irrumpir en nuestro despojo.

Todo puede ser un obstáculo para esta epifanía de Dios; por eso todo se ha de silenciar.

Dios necesita nuestro silencio. Pero Dios merece también nuestro silencio, para él son todas las cosas.

Presentación del libro Conversaciones íntimas con Teresa
                          de Jesús de Quintín García

Día: 12 de junio. Hora: 7 de la tarde   Lugar: iglesia de Moríñigo

Conversaciones íntimas Carátula.jpg


EDICIÓN DIGITAL Y EN PAPEL
Quintín García concentra en ‘Conversaciones íntimas con Teresa de Jesús’ su obra poética sobre la gran escritora
El poeta y religioso dominico, colaborador de SALAMANCArtv AL DÍA, presenta la primera obra autopublicada en la Nubeteca de Peñaranda de Bracamonte
http://salamancartvaldia.es/upload/img/periodico/img_330382.jpg
Los versos a Santa Teresa, en la nube. El escritor Quintín García, colaborador de SALAMANCArtv AL DÍA, ha concentrado en ‘Conversaciones íntimas con Teresa de Jesús’ su obra sobre la gran escritora, con una excepcional novedad, su perfil de edición, ya que cuenta con formato digital y en papel gracias a la plataforma de autopublicación Bubok.
Conversaciones íntimas con Teresa de Jesús contiene dos libros, ‘Carne en fulgor’ e ‘Íntimos retornos con Teresa’. Según Quintín García, son dos libros nacidos en momentos diferentes, “quizás con brillos poéticos también distintos, pero que forman una unidad en el empeño de ser los dos unas largas e íntimas conversaciones con Teresa de Jesús”.
En 2006, Quintín González obtuvo el Premio Kutxa de poesía Ciudad de Irún con el libro Carne en fulgor que, como señala Antonio Colinas es un diálogo del protagonista con la vida y la obra de una mística Teresa de Jesús. Pero lo significativo era ver cómo en cada poema (…) se pasaba de ese mundo espiritual al mundo del testimonio, de la denuncia social y política (Auschwitz, Hiroshima, Vietnan, Palestina, Sarajevo, 11M…)
http://salamancartvaldia.es/upload/img/periodico/img_330381.jpg
Nueve años después, Quintín González, ofrece íntimos retornos con Teresa de Jesús, otro largo encuentro poético donde, como el mismo afirma, el diálogo con la santa busca curar las heridas del prójimo y las alusiones concretas a las venas abiertas de la América Latina y África. Para Antonio Colinas lo más sorprendente, lo llamativo y lo bien logrado de este libro es ver cómo dialogan dos tiempos, dos espíritus, dos culturas y, en definitiva dos voces: la de ayer con las de hoy.
La presentación de Conversaciones íntimas con Teresa de Jesús se contextualiza en la celebración del V Centenario del nacimiento de Santa Teresa, uniéndose así a las actuaciones que se están llevando a cabo en la Biblioteca Municipal de Peñaranda de Bracamonte. Gracias a un acuerdo con la Fundación Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes, el Centro de Desarrollo Sociocultural ha puesto en marcha una iniciativa que, siguiendo el lema oficial Huellas de Teresa de Jesús, permite la descarga de libros relacionados con Santa Teresa, desde diferentes lugares de la ciudad de Peñaranda.
Conversaciones íntimas con Teresa de Jesús está disponible en Bubok y, dentro de unos días, en las principales plataforma de venta de libros on line.
En el acto de presentación, el autor estuvo acompañado por Sergio Mejías, director de Bubok, y Javier Valbuena, director del Centro de Desarrollo Sociocultural de Peñaranda.
La autopublicación es uno de los pilares de la Nubeteca y tiene que ver con la necesidad de contar, de relatar y, sobre todo, de verse publicada, y si es posible editada, que siempre ha tenido la sociedad. La inserción de sistemas de autopublicación en una biblioteca constituye una oportunidad única para dar voz a todos los que, por cualquier razón, tengan algo que exponer: sus vivencias, sus relatos, sus sentimientos antiguos o recientes.
Con esta filosofía, en febrero de este año, la Fundación Germán Sánchez Ruipérez firmó un convenio con Bubok para su participación en el proyecto Nubeteca. Como resultado del mismo, cualquier socio de las bibliotecas de la provincia de Badajoz y de la Biblioteca de Peñaranda de Bracamonte puede autopublicar su obra siguiendo un sencillo protocolo que se ha diseñado para regularizar el proceso.
Bubok Publishing, fundada en España en 2008 como una plataforma de autopublicación y venta de libros (www.bubok.es) se ha consolidado como una web de referencia para los amantes de la escritura y una editorial independiente. En la actualidad es una empresa internacional, con presencia en México, Colombia, Argentina, Suecia, Portugal, Reino Unido, Francia y Brasil. Actualmente, cuenta con más de 80.000 usuarios registrados. Tiene importantes acuerdos con entidades como la Biblioteca Nacional, el Ministerio de Justicia o la Cervantes Virtual, y cuenta con una excelente distribución de sus libros gracias a las más de 500 librerías asociadas, a su propia librería física situada en el centro de Madrid y a la integración del catálogo de sus ebooks en plataformas como Amazon.es, Casadellibro.com, Libranda.com, elCorteIngles.es, Apple y Google eBooks.
Bubok Publishing es una plataforma que ofrece a sus escritores la posibilidad de autopublicar y vender sus obras de forma gratuita. El propio autor es quien fija el precio al que quiere vender su obra, y quien elige el formato en el que va a publicar: papel y/o Ebook. Gracias al sistema de impresión bajo demanda, el escritor nunca pierde dinero, ya que solamente se imprime el número de libros que hayan pedido los lectores.
En la Nubeteca, el lector puede llegar a la autopublicación por diferentes caminos, de manera independiente o a través de la plataforma; de forma autónoma o de la mano de la biblioteca, institución que, además de canalizar las propuestas espontáneas recibidas, debe detectar ese talento local y desarrollar estrategias para su captación.
El 9 de mayo se presentó en Campanario (Badajoz) el libro Entre la Guarda y el Río Ortiga, del autor pacense Juan Romero Sánchez; un mes después se presenta la obra de un autor residente en la Comarca de Tierra de Peñaranda y cuya publicación ha aprovechando toda la potencialidad de la plataforma Bubok. El martes 9, lo hace en Peñaranda de Bracamonte, y el viernes 12, en Moríñigo.
PARA SU ADQUISICIÓN
La edición digital tiene un coste de 1,99 €, y cuenta con una promoción especial, mientras dure la exposición de las Edades del hombre Teresa de Jesús: maestra de oración, de 1 €. La edición en papel con un formato de 13x21 cm y una tirada de 300 ejemplares, se puede adquirir por 5 €. La edición en papel bajo demanda a través de Bubok con formato de 13x21 cm, tiene un coste de 9,01 €.
Con información del Centro de Desarrollo Cultural de la Fundación Germán Sánchez Ruipérez
http://salamancartvaldia.es/upload/img/periodico/img_330378.jpg


¿“Iglesia de puros” o “red con peces mezclados”?

Entrevista de Antonio Spadaro a fr. Jean-Miguel Garrigues en la revista La Civiltà Cattólica, traducida al español por la revista Mensaje.

http://www.dominicos.org/ShowIcon.aspx?img=/kit_upload/image/Noticias/OPGeneral/2015/jean-miguel-garrigues-ico.jpg
10 de junio de 2015

¿Iglesia de puros o red que contiene mezclados buenos y malos peces, como dice san Agustín? Esta es la pregunta que llevo en mi mente mientras llegan mis huéspedes: el cardenal Christoph Schönborn y su hermano dominico Jean-Miguel Garrigues. Los recibo en mi despacho en el cual domina el blanco, color característico de los hijos de santo Domingo.
Los dominicos y los jesuitas han sido a menudo descritos juntos, pero en conflicto. La historia es inclemente. Pero es también verdad que hay entre ellos una profunda afinidad, hasta el punto que más de un miembro de sus dos respectivas órdenes, a cierto punto de su vivencia vocacional, se han encontrado ante la opción de escoger entre el camino de san Ignacio y el de santo Domingo. Entre ellos, el mismo papa Francisco.
Durante nuestra conversación sobre la Iglesia, sobre el momento que vivimos, sobre las dificultades y los retos venideros, prevalece un sentimiento de ánimo y de confianza. El cardenal y el profesor manifiestan en su conversación la agudeza incisiva del intelectual y la pasión de la solicitud pastoral. Los dos, de manera diferente, han vivido plenamente estas dos dimensiones. El primero como arzobispo de Viena, el segundo como fundador, con otros hermanos, de fraternidades monásticas en parroquias de las diócesis de Aix-en-Provence y Lyon. El cardenal Schönborn me presenta a su hermano, amigo y condiscípulo, y después me deja hablar con él.
El nombre del P. Jean-Miguel Garrigues, unido a su italiano perfecto, hace presentir une variedad de raíces culturales y geográficas. Nace en Istanbul en 1944 en una familia de diplomáticos españoles. Entra en los dominicos de Francia en 1963. Estudia en Le Saulchoir donde se licencia en Filosofía Teología. Ordenado sacerdote, pasa un año de estudios en la Facultad de Teología Ortodoxa de Tesalónica, e integra la Facultad de Teología del Instituto Católico de Paris donde defiende una tesis de doctorado sobre san Máximo el Confesor. Profesor de teología, ha ejercido diversos cargos. Entre 1989 y 1992, ha colaborado en calidad de experto con el actualmente cardenal Schönborn en la redacción del Catecismo de la Iglesia Católica.
Del 2000 al 2014, ha participado, bajo la dirección de los cardenales dominicos Cottier y Schönborn, al dialogo entre católicos y un grupo de Judíos Mesiánicos. Actualmente enseña teología patrística y dogmática en el Instituto Superior Tomás de Aquino, en la casa de estudios de los dominicos de Toulouse y en el seminario de Ars. Vive pues al lado de la tumba de santo Tomás y da clases en un lugar prestigioso de estudios tomistas. Ha publicado una veintena de libros de dogmática, de patrística, de ecumenismo y de teología de la política. Numerosos son sus artículos en revistas como La Revue Thomiste, La Nouvelle Revue Théologique, Nova et Vetera, Communio. Desde 2005, es miembro corresponsal de la Academia Pontificia de Teología de Roma.
El P. Garrigues profesa de entrada su simpatía por la tradición de los jesuitas: "Tengo una inmensa deuda hacia el P. Henri de Lubac. Lo conocí en Paris en los años setenta, gracias a su amistad con el dominico que dirigía mi tesis de doctorado, el P. Marie-Joseph Le Guillou. Ha sido para mí una inmensa alegría el haber escrito recientemente una larga introducción al volumen de sus obras completas que recoge su correspondencia con Jacques Maritain. Pude conocer también a este último, en Toulouse, durante el último año de su vida. Para mí, ha sido un maestro intelectual y espiritual".
Leer el artículo completo: Mensaje.

¿“Iglesia de puros” o “red con peces mezclados”?

Noticia Destacada
 | 08/06/2015

Por: Antonio Spadaro s.j.



Entrevista imperdible con Jean-Miguel Garrigues o.p. “No tengamos ni el espíritu duro con un corazón seco, ni el corazón tierno con un espíritu blandengue. Pues son estas dos actitudes las que tienden hoy día a enfrentarse en una dialéctica estéril”. *Texto original en italiano publicado en La Civiltà Cattólica, 2015 II 493-510, n° 3959 (13 de junio de 2015).
¿Iglesia de puros o red que contiene mezclados buenos y malos peces, como dice san Agustín? Esta es la pregunta que llevo en mi mente mientras llegan mis huéspedes: el cardenal Christoph Schönborn y su hermano dominico Jean-Miguel Garrigues. Los recibo en mi despacho en el cual domina el blanco, color característico de los hijos de santo Domingo. Los dominicos y los jesuitas han sido a menudo descritos juntos, pero en conflicto. La historia es inclemente. Pero es también verdad que hay entre ellos una profunda afinidad, hasta el punto que más de un miembro de sus dos respectivas órdenes, a cierto punto de su vivencia vocacional, se han encontrado ante la opción de escoger entre el camino de san Ignacio y el de santo Domingo. Entre ellos, el mismo papa Francisco.
Durante nuestra conversación sobre la Iglesia, sobre el momento que vivimos, sobre las dificultades y los retos venideros, prevalece un sentimiento de ánimo y de confianza. El cardenal y el profesor manifiestan en su conversación la agudeza incisiva del intelectual y la pasión de la solicitud pastoral. Los dos, de manera diferente, han vivido plenamente estas dos dimensiones. El primero como arzobispo de Viena, el segundo como fundador, con otros hermanos, de fraternidades monásticas en parroquias de las diócesis de Aix-en-Provence y Lyon. El cardenal Schönborn me presenta a su hermano, amigo y condiscípulo, y después me deja hablar con él.
El nombre del P. Jean-Miguel Garrigues, unido a su italiano perfecto, hace presentir une variedad de raíces culturales y geográficas. Nace en Istanbul en 1944 en una familia de diplomáticos españoles. Entra en los dominicos de Francia en 1963. Estudia en Le Saulchoir donde se licencia en Filosofía Teología. Ordenado sacerdote, pasa un año de estudios en la Facultad de Teología Ortodoxa de Tesalónica, e integra la Facultad de Teología del Instituto Católico de Paris donde defiende una tesis de doctorado sobre san Máximo el Confesor. Profesor de teología, ha ejercido diversos cargos. Entre 1989 y 1992, ha colaborado en calidad de experto con el actualmente cardenal Schönborn en la redacción del Catecismo de la Iglesia Católica.
Del 2000 al 2014, ha participado, bajo la dirección de los cardenales dominicos Cottier y Schönborn, al dialogo entre católicos y un grupo de Judíos Mesiánicos. Actualmente enseña teología patrística y dogmática en el Instituto Superior Tomás de Aquino, en la casa de estudios de los dominicos de Toulouse y en el seminario de Ars. Vive pues al lado de la tumba de santo Tomás y da clases en un lugar prestigioso de estudios tomistas. Ha publicado una veintena de libros de dogmática, de patrística, de ecumenismo y de teología de la política. Numerosos son sus artículos en revistas como La Revue Thomiste, La Nouvelle Revue Théologique, Nova et Vetera, Communio. Desde 2005, es miembro corresponsal de la Academia Pontificia de Teología de Roma.
El P. Garrigues profesa de entrada su simpatía por la tradición de los jesuitas: “Tengo una inmensa deuda hacia el P. Henri de Lubac. Lo conocí en Paris en los años setenta, gracias a su amistad con el dominico que dirigía mi tesis de doctorado, el P. Marie-Joseph Le Guillou. Ha sido para mí una inmensa alegría el haber escrito recientemente una larga introducción al volumen de sus obras completas que recoge su correspondencia con Jacques Maritain. Pude conocer también a este último, en Toulouse, durante el último año de su vida. Para mí, ha sido un maestro intelectual y espiritual”.
—¿Y las históricas divergencias teológicas entre dominicos y jesuitas?
Ese conflicto ha sido una maniobra diabólica para privar a la Iglesia de los frutos de la complementariedad entre nuestros carismas respectivos. Nosotros predicamos, preocupados ante todo de exponer con precisión la Palabra de Dios y su Sacra Doctrina. Vosotros, los jesuitas, sois misionarios y educadores en el sentido más amplio de la palabra, deseosos de ayudar a las almas a recibir esa Palabra. Nuestros carismas respectivos se encuentran el uno y el otro a cada extremidad de la misma comunicación misteriosa de la Palabra de Dios.
—¿Conoce pues usted la mística de los jesuitas y los Ejercicios Espirituales?
Fue la lectura de Maritain la que me introdujo a los escritos de Lallemand, de Surin y de Caussade.
—¡Pero si son precisamente los autores preferidos del papa Francisco! Algunos han escrito que él está dando Ejercicios Espirituales a la Iglesia de hoy. ¿Qué le parece?
¿Qué mejor cosa puede dar un hijo de san Ignacio de Loyola, el autor de los Ejercicios Espirituales? Tiene usted razón: el Santo Padre está situando a los creyentes ante les exigencias prácticas, es decir evangélicas y teologales, de su fe. Nos está haciendo hacer “ejercicios espirituales”. Hay pues que prever que este ejercicio resulte perturbador para un cierto confort espiritual que asocia amablemente, en una agradable mundanidad, opiniones bienpensantes y bien rígidas con la complacencia de juzgar al prójimo. Otros aplauden muy fuerte este discernimiento espiritual del papa, con la esperanza que esto vaya a devolver a los católicos al subjetivismo y al relativismo moral. No deberían sin embargo alegrarse demasiado de prisa. Estas desviaciones habían exigido a partir del final de los años 1970 que san Juan-Pablo II y Benedicto XVI asegurasen de nuevo los fundamentos de la fe frente a una interpretación del concilio Vaticano II en clave de ruptura de Tradición. Si el papa Francisco puede hoy día referirse a la reforma evangélica de la Iglesia, es porque han sido firmemente asegurados esos fundamentos que estaban amenazados por un una falsa interpretación relativista de ese espíritu. Tengamos presente que, entre los amigos de corazón del nuevo papa, están los cristianos evangélicos, como los pastores que le gusta visitar, que ciertamente no pueden ser sospechosos de liberalismo bíblico, ni de laxismo moral, sino todo lo contrario.
—¿Entonces el papa Francisco es un Pontífice de la tradición autentica?
Al inclinarse con compasión sobre los heridos de la vida familiar, me parece que el papa ha reanudado de hecho con una vieja tradición romana de misericordia eclesial hacia los pecadores. La Iglesia de Roma, quien a partir del siglo II había inaugurado la práctica de la penitencia por los pecados posteriores al bautismo, en el siglo III estuvo a punto de provocar un cisma por parte de la Iglesia de África del Norte, conducida por san Cipriano, porque reconciliaba a los lapsi, es decir a los que habían apostatado en las persecuciones, los cuales eran muchos más numerosos desgraciadamente que los mártires. Frente al rigorismo de los Donatistas en los siglos IV y V, como más tarde frente al de los Calvinistas y los Jansenistas en los siglos XVI y XVII, ha rechazado una “Iglesia de puros” en beneficio del “reticulum mixtum”, es decir de la red que reúne a justos y a pecadores, de la cual habla san Agustin en su Psalmus contra partem Donati.
—Me parece interesante esta referencia a la tradición eclesial junto con la tradición del carisma de san Ignacio. Implica una visión de la Iglesia, ¿no cree?
Francisco es Papa siendo jesuita. Por eso es el fruto maduro de una gran tradición espiritual que también ha defendido lo que venimos de decir contra el rigorismo de la Reforma y el elitismo de los Jansenistas. La visión de la Iglesia que tiene Francisco es la de una Iglesia para todos, puesto que —mal que le pese a Port-Royal— Cristo ha muerto por todos los hombres sin excepción y no por solo unos cuantos. La Iglesia no es pues un club selecto y cerrado: ni el de un grupo social católico por tradición, ni siquiera el de gente capaz de heroísmo virtuoso. Para esta Iglesia de las puertas misericordiosamente abiertas, vosotros los jesuitas habéis reconquistado durante tres siglos una gran parte de Europa, que se había pasado al protestantismo, con una pastoral de la misericordia y del Corazón de Jesús expresada a través de la “teodramática” barroca y de la pedagogía pastoral de la casuística. El objetivo ha sido siempre “ayudar a la almas” en la situación concreta en que Dios les llama.
—Misericordia y verdad, sabiendo que la verdad “es” misericordia…
En un contexto eclesial, en el que los principios doctrinales y morales han sido consolidados por los dos grandes papas que le han precedido, el papa Francisco reanuda instintivamente con esta tradición de misericordia, pues no quiere ya cerrar los ojos ante las miserias de tantos hijos suyos. A la vez, como se pudo constatar con ocasión del último sínodo romano de los obispos, confía en la dinámica eclesial para encontrar, poco a poco y a veces trabajosamente, la articulación entre la verdad de los fundamentos de la fe y la misericordia pastoral hacia las personas.
—¿No cree usted que en nuestra palabra de Iglesia tendemos a menudo a hablar en términos ideales? Está bien, pues esto nos permite tener una visión directora. Creo sin embargo que tendremos que encontrar palabras buenas para las situaciones que no corresponden con este ideal. Lo que no corresponde con el ideal no debe ser juzgado siempre de manera negativa, sino como etapa de un camino. He aquí mi pregunta: se puede valorizar alguna forma de gradualidad? El punto n°11 de la Relatio Synodi me parece haber visto justo en este sentido. Es el corazón vivo de la Relatio, allí donde dice que “hace falta acoger a las personas, con su existencia concreta, saber sostener su búsqueda, alentar su deseo de Dios, incluso en aquellos que han vivido un fracaso o que se encuentran en las situaciones más contrastadas”. ¿Qué le parece?
Creo que perder la comprensión de los fundamentos de la pareja y de la familia sería pretender avanzar sin brújula, guiado solo por una compasión afectiva condenada a volcar en un sentimentalismo irrealista. Por ejemplo, es una verdad ineludible el que todos los cristianos vivimos bajo la ley de Cristo y que a todos se aplica la indisolubilidad del matrimonio. No hay pues una “gradualidad de la ley”, una finalidad moral que variaría según las situaciones del sujeto. Sin embargo, no es negar o relativizar esta verdad el pedir a los que no consiguen seguir este mandamiento de Cristo que no añadan al pecado de infidelidad el de injusticia, por ejemplo non pagando la pensión alimentaria después de un divorcio civil. Como decía el rey de Francia Luis XV a un cortesano que se burlaba de él porque no comía carne el viernes mientras tenía una querida: “No es porque se hace un pecado que hay que hacer dos”. Aquí es donde se sitúa la “ley de gradualidad” que invita a las personas que, de hecho, no son capaces de romper de golpe con el pecado a salir progresivamente del mal empezando por hacer la parte de bien (todavía insuficiente pero real) del que son capaces.
Hay aquí una casuística que corresponde al ejercicio progresivo del bien y que no contradice en nada el principio que exige que específicamente la ley natural y la ley de Cristo se apliquen igualmente a todos los cristianos.
—¿Hay pues que evitar una pastoral del “todo o nada”?
Esto es. La pastoral del todo o nada parece más “segura” a los teólogos “tucioristas”, pero conduce inevitablemente a una “Iglesia de puros”. Al valorizar ante todo la perfección formal como un fin en sí, se corre desgraciadamente el riesgo de recubrir de hecho bastantes comportamientos hipócritas y “farisaicos”. El discernimiento del papa de los Ejercicios Espirituales le lleva inevitablemente a poner el dedo en esta llaga. Como un buen médico, prefiere arriesgarse a hacer daño antes que dejar que el mal del orgullo espiritual se esconda debajo de un bien formalmente virtuoso.
El discernimiento tan penetrante del papa en lo que toca a la dinámica personal de nuestros actos humanos no puede ser confundido banalmente con un relativismo. Sería insensato confundir la “ley de gradualidad”, la cual orienta un ejercicio progresivo y siempre finalizado del acto libre hacia la virtud, con el relativismo subjetivista de una “gradualidad de la ley”. La encíclica Veritatis splendor de san Juan-Pablo II ha cerrado definitivamente en la Iglesia la entrada de este callejón sin salida. Pero ha dejado abierto el taller del ejercicio prudencial del acto libre de un pecador que, salvo gracia excepcional, no se moraliza de golpe.
—Se comprende bien la preocupación de ese papa frente al desarrollo del individualismo y del subjetivismo en materia moral. En la encíclica hay palabras que exigen una lectura atenta y sabia.
Un buen ejemplo de esto es el n°52, donde podemos leer: “Los preceptos negativos de la ley natural son universalmente válidos: obligan a todos y cada uno, siempre y en toda circunstancia. En efecto, se trata de prohibiciones que vedan una determinada acción “semper et pro Semper”, sin excepciones”. Santo Tomás, en efecto, distingue las certezas y los métodos especulativos, de los métodos y de las certezas morales. En las cosas especulativas, la verdad no tiene ninguna excepción, ni en los casos particulares, ni en los principios generales. La razón práctica, es decir la moral, se ocupa por su lado de realidades contingentes. Los principios generales son siempre universales, pero cuanto más se entra en las cuestiones particulares, más excepciones se encuentran. Siempre en la Suma Teológica, santo Tomás afirma más adelante que puede haber modificaciones en la ley natural, en tal caso particular y como excepción por ciertas causas especiales.
—La pregunta que se hace uno entonces es: ¿Quien determina les excepciones? Necesitamos comprender mejor, con imágenes más claras que nos hablen de nuestro caminar.
Habla usted de imágenes y yo tengo una en la mente que me parce muy eficaz. No sonría: el GPS, o navegador. Cuando tenemos que ir a algún sitio, introducimos una dirección en el navegador. ¿No es eso?
—Así es. ¿Pero a qué cuento viene aquí el GPS?
Déjeme decírselo. La premisa teórica para la utilización de esta metáfora es que los principios morales que conciernen los fines inherentes al ser humano no son metas que cada uno escoge para sí mismo como quiere. Ellos expresan de hecho finalidades de la vida humana que son intermedias con respecto al fin último que es Dios mismo. La Iglesia los discierne de manera progresiva, homogénea e irreversible en el desarrollo de su doctrina moral. Pero esta finalidad afecta a cada ser humano, a la vez en su naturaleza y en su gracia, atrayéndole hacia Dios en su libertad personal. Si respondiéramos todos como la Virgen María, nuestra vida correspondería al primer itinerario que el GPS nos indica para ir a la dirección indicada.
—Mi experiencia, efectivamente, es que a veces tomo un mal camino, pues no comprendo bien las indicaciones del GPS, o porque estoy distraído, o bien porque la carretera está cortada.
Es exactamente lo que le iba a decir. Sabemos que “todos han pecado” (Rom 5, 12) y que, como dice santa Teresa de Lisieux, “somos todos capaces de todo”. Somos pecadores y ciertamente no respondemos como la Virgen María. ¿Pues bien, qué hace el GPS cuando nos desviamos del itinerario indicado para llegar a la dirección? No nos pide que volvamos a nuestro punto de partida para volver a tomar el primer camino que nos había indicado. Nos propone un itinerario alternativo a partir de la situación en la cual nos encontramos.
—Sí, es cierto, ahora comprendo…
Ahora bien: de manera análoga, cada vez que nos desviamos por nuestro pecado, Dios no nos pide volver a nuestro punto de partida, pues la conversión bíblica del corazón (metanoia) no es una vuelta (epistrophè) platónica al comienzo, sino que Dios nos reorienta hacia sí mismo trazándonos una nueva ruta hacia él. Hay que subrayar que, igual que la dirección no cambia en el GPS, los fines morales tampoco cambian en el gobierno divino. Lo que cambia (¡y como!) es el itinerario de cada persona en su libre caminar hacia Dios. Pensemos en los numerosos itinerarios alternativos que el GPS divino debió indicar al Buen Ladrón antes del último y supremamente dramático de la cruz.—Le doy las gracias por esta imagen muy eficaz con su fuerza de explicitación. Michael Fuller, teólogo y químico orgánico, ha escrito que los teólogos pueden observar útilmente las evoluciones tecnológicas para descubrir qué metáforas y qué analogías pueden enriquecer el pensamiento teológico. La imagen que ha utilizado es una de ellas. Usted ve pues así el valor y el significado verdadero de la ley de gradualidad como dinámica de la conversión personal, ya que indica cada vez un camino personal que sin embargo sigue estando siempre finalizado por los mismos fines morales y teologales.
Usted lo sabe bien como jesuita. Es eso mismo a lo que tiende el carisma ignaciano de “ayudar a las almas”. Ese carisma de ayuda se manifiesta en el comportamiento y en las palabras del papa Francisco. Yo lo veo como una cooperación con la Providencia divina que nos alcanza cada vez en lo concreto de nuestra situación personal, a la vez interior y exterior. Por eso, perder de vista esa manera misericordiosa con que Dios nuestro Padre nos dirige, es desencarnar las finalidades morales haciendo de ellas un cuerpo de doctrina ideal de tipo platónico que no nos alcanza en nuestra vida. Corre el peligro que lo defendamos sobre todo por motivos no evangélicos, como autoafirmarnos (a nosotros mismos y a nuestro mundo) condenando a los débiles que no consiguen aplicarlo. Esto significa principalmente olvidar que la moral que enseña la Iglesia es una sabiduría práctica que da vida, no un “farisaísmo” que se autojustifica juzgando a los otros. Esto en fin implica correr el riesgo de ser visto por los no creyentes, incluso de buena voluntad, como una secta con convicciones fanáticas.
—Indudablemente, lo que usted dice tiene consecuencias y proyecciones en la vida cristiana, sobre por ejemplo la manera de comprender el testimonio cristiano, incluso el de los movimientos de Iglesia, y la forma de la misión que justamente no tiene que convertirse en fanatismo.
Así es. Partamos de esta consideración: el papa san Juan-Pablo II de manera profética y el papa Benedicto XVI de manera magistral han suscitado el uno y el otro lo que se ha llamado la “generación JMJ”, le generación de las Jornadas Mundiales de la Juventud. Esta ha sido particularmente emblemática y activa por su papel dinámico de “minoría significativa” que propone un comportamiento moral alternativo al relativismo permisivo de las sociedades post-cristianas. No obstante, después del tiempo en que los papas han animado el nacimiento y el primer crecimiento de esta generación, llega el momento del discernimiento, exigido entre otras cosas de manera urgente por las crisis que han afectado a bastantes de estos movimientos y comunidades. En efecto, nacidos en sociedades post-cristianas, llevan algunos rasgos de la mentalidad a la que sin embargo se oponen en el terreno de la moral de la familia y de la vida: aunque solo sea la preocupación por la eficacia y la visibilidad, que puede llevar a comportamientos de marketing espiritual, de búsqueda de lo espectacular y de un culto de lo juvenil que se opone a la generación anterior, la del concilio Vaticano II, a veces en nombre de un tradicionalismo, por cierto más soñado que real. El discernimiento ignaciano del papa Francisco no ha dejado de señalar en su conducta rasgos que corregir para que el profetismo de su testimonio, a menudo admirable y a veces heroico, no se vea contaminado subrepticiamente por motivaciones no evangélicas. La más grave sería dárselas de ejemplo arrogante de virtud familiar ante los otros, juzgando implícitamente a los que no consiguen vivir como ellos, y ser incapaces de reconocer y de acoger la parte de bien que hay a pesar de todo en la vida de estos, en vez de ayudarles a llevar su carga como pide san Pablo (Ga 6, 2).
—Constato sin embargo que algunas voces se declaran inquietas acerca del respeto a la doctrina. Me refiero, por ejemplo, a la manera con que han sido recibidas las discusiones sinodales. He participado al Sínodo y puedo testimoniar que ni un solo instante la doctrina ha sido puesta en tela de juicio. Todo lo contrario, un elemento interesante del Sínodo ha sido justamente la libertad de discutir sin “poner en tela de juicio”. Más allá del debate correcto y libre, observo sin embargo con preocupación que alguna persona y algún grupo se expresan con acentos violentos, agresivos, ruidosos. Uno de los puntos que ha inquietado a algunos, por ejemplo, es el que se haya dicho que puede haber algún bien humano incluso en las personas que viven en situaciones irregulares.
Es en efecto significativo que uno de los puntos que ha suscitado más revuelo, es la afirmación que puede haber algún bien en personas que viven en uniones de hecho que, o no son asimilables al matrimonio, como las uniones homosexuales, o que solo realizan imperfectamente sus requisitos, como les uniones civiles en las cuales hay uno o dos divorciados. En esta reacción se puede apreciar como un cierto jansenismo puede infiltrase en los que desean una “Iglesia de puros”.
—¿Qué diría hoy santo Tomás de Aquino?
Para san Agustín, que se opone al pelagianismo, sin la gracia – ya sea en pensamiento, en voluntad, en amor o en acción – los hombres no pueden hacer absolutamente nada bueno. Santo Tomás, él, aunque está de acuerdo con san Agustín sobre la imposibilidad de una vida moralmente buena sin la gracia, tiene un posición mucho más matizada al distinguir la moralidad de la existencia personal de la de tal o cual de los actos de la persona. En el tratado de la fe de la Suma Teológica, se pregunta si toda acción de los infieles es un pecado. Contesta lo siguiente fundándose en el caso del centurión Cornelio en Hechos 10, 31: “Las acciones de los infieles no son todas pecados, pero algunas son buenas”. Y precisa que, puesto que “el pecado mortal no estropea totalmente el bien de la naturaleza”, “el infiel puede también hacer una buena acción en aquello que él no relaciona con la infidelidad como con un fin”. Para santo Tomás, aunque sin la gracia no podemos hacer “todo el bien” que está en nuestra naturaleza, pues está herida al no estar ya ordenada a su fin último, podemos sin embargo hacer actos moralmente buenos en tal o cual aspecto de nuestra vida, sin que esta se vuelva por eso moralmente buena en su finalidad personal. Esto permite comprender por ejemplo la paradoja de esos criminales que pueden comportarse en algunas ocasiones como buenos padres de familia.
—Hablamos de lo que santo Tomás y la teología clásica llaman la “gracia operante”, por la cual Dios conduce al pecador a la justificación, pudiendo este último también rechazarla. Uno piensa en lo que dice el concilio de Trento en su decreto sobre la justificación.
Santo Tomás reconoce que la justificación no es milagrosa y que su preparación puede pedir tiempo y una colaboración por parte del hombre. Esta, si no nos merece la gracia, constituye sin embargo une cooperación con la gracia operante bajo la moción de esta para disponer el alma a la justificación. Como la gracia operante previene todo hombre que Dios quiere salvar, esta preparación a la justificación, por poco que los pecadores se dejen disponer, produce sin cesar, apoyándose sobre lo que en su humanidad está menos estropeado, actos buenos que, sin ser meritorios pues no están todavía movidos por la caridad, mantienen por la misericordia de Dios trozos de bien natural en las personas, en las familias y en las sociedades.
—Usted mantiene que es así como hay que entender y explicar la afirmación hecha en el Sínodo de los obispos que ha inquietado a los partidarios del “todo o nada”.
Exactamente. La teología de la preparación progresiva a la justificación y de lo que hemos llamado el GPS divino permite dar una interpretación de la ley de gradualidad que la pone al abrigo de ser interpretada como una gradualidad de la ley en una “moral de situación” subjetivista que el magisterio ha rechazado. Permite también comprender que, la persona humana no estando determinada por sus condicionamientos, los hombres pueden responder a la gracia salvadora de Cristo que los atrae hacia la caridad incluso cuando están en estructuras mentales y sociales imperfectas con respecto a la verdad. Los seres humanos pueden caminar hacia la salvación de Cristo cumpliendo una parte importante de bien moral en una unión imperfectamente matrimonial, e incluso en una unión radicalmente diferente del matrimonio. Si esas personas no son santificadas por estas uniones de hecho, pueden serlo en estas uniones por todo lo que en ellas dispone a la caridad a través de la ayuda recíproca y de la amistad. Todos los que han frecuentado a divorciados casados civilmente o a parejas homosexuales han podido constatar esa abnegación a veces heroica. ¿En qué el negar esto hará más fuertes nuestras certezas y nuestro testimonio a la verdad?
—El punto más importante en lo que usted dice es que, nosotros los católicos, debemos encontrar una manera positiva de afirmar nuestras certezas morales, en vez de pararnos al juicio, el cual resbala tan fácilmente del acto a su autor. Si nosotros creemos de verdad que el camino que nos traza la Iglesia siguiendo a Cristo es un camino de vida y de auténtica felicidad, nuestra certeza no tiene necesidad de condenar y de rechazar a los que no la comparten o que no consiguen vivir en conformidad con ella.
En efecto, no se ve en qué una pastoral más misericordiosa con los “débiles” podría hacer que las parejas “fuertes” y a veces heroicas puedan sentirse mofadas o despreciadas. Si fuese el caso, sería que su virtud está demasiado fundada en la autosatisfacción y por consiguiente es una “obra muerta”, pues privada de caridad. La caridad se expresa al contrario en misericordia, siendo capaz de acercarse fraternalmente al que avanza a tientas por el camino de su vida, de reconocer la parte de bondad que permanece en él y de llevar con él un poco de su carga. ¿No es a esto que nos llama el papa Francisco en estos estupendos ejercicios espirituales que, como buen jesuita, nos está dando cada día?
—En el tiempo que nos separa del próximo Sínodo, nosotros los creyentes debemos rezar para que la Iglesia encuentre como dar mejor testimonio de sus certezas, con vigor en lo que toca a la verdad de Cristo, pero sin que esta se convierta en rigidez. Debemos de estar atentos a salvar a los que se pierden en vez de estar preocupados solo en no perder a los que se salvan.
La rigidez doctrinal y el rigorismo moral pueden conducir, incluso a los teólogos, a posiciones extremistas que desafían al sentido de la fe de los fieles e incluso el mismo sentido común. Una reciente crónica periodística citaba elogiosamente la carta de un teólogo americano en la cual este profiere estas afirmaciones insensatas sobre la gravedad respectiva de la contracepción y del aborto: “¿Cual es en ese caso el mal más grave? ¿Es el de impedir la concepción y la existencia de un ser dotado de un alma inmortal, querida por Dios y destinada a una felicidad eterna? ¿O es el de interrumpir el desarrollo de un niño en el seno de su madre? Ciertamente un tal aborto es un mal grave y es calificado por la Gaudium et Spes como un “crimen abominable”. Pero existe sin embargo un niño que vivirá eternamente. En cambio, en el primer caso, un niño que Dios quería hacer venir al mundo no existirá”. Con un tal razonamiento se considera pues el aborto como más aceptable que la contracepción. ¡Increíble!
—Sí, yo comparto su juicio. Yo también he leído esas palabras y he quedado chocado por su carácter lucidamente insensato.
No es una casualidad si ese razonamiento procede de un representante de la parte más dura de la corriente “tuciorista”, opinión por cierto condenada por el Santo Oficio en 1690, que se opone al enfoque mucho más matizado del papa Francisco, el cual toma más en cuenta los casos particulares. Pienso que esta misma corriente ha pedido que fuese retirada en el Sínodo de 2014 la referencia a “ley de gradualidad”, la cual tiene ciertamente que ser distinguida de una “gradualidad de la ley” en su especificación. Esta ley se encontraba sin embargo ya mencionada en la exhortación apostólica post-sinodal de san Juan Pablo II Familiaris consortio (1981) y es aplicada en la práctica por todos los confesores y directores espirituales que quieren acompañar pastoralmente a los que san Juan Pablo II llamaba los “heridos de la vida”.
—Y me parce que ese razonamiento es semejante al de aquellos que ya se habían escandalizado cuando misionarias, expuestas en ciertas partes del mundo en guerra al peligro de ser violadas, recibieron la autorización de tomar la píldora contraceptiva. Según ellos, toda relación sexual, sean cual sean sus circunstancias, incluso de violación, tiene que permanecer abierta a la fecundidad, porque Dios puede querer de esta manera hacer venir una nueva alma a la vida.
Sí, son los mismos que han pedido que san Juan Pablo II, en su encíclica Veritatis splendor (1993) proclamase como dogma de fe que “matar a un inocente es siempre un crimen sean las que sean las circunstancias del acto”. Juan Pablo II no lo hizo pues, no admitiendo una fórmula dogmática irreformable consideraciones ni excepciones, habría por el hecho mismo deslegitimado la doctrina católica de la legítima defensa, esta última pudiendo conllevar la muerte de inocentes en actos de doble efecto que ocasionan daños colaterales. Es siempre la misma corriente la que ha criticado más recientemente la opinión personal de Benedicto XVI en su libro no-magisterial La luz del mundo (2010) porque había dicho a propósito del preservativo: “Puede haber casos justificados singulares, por ejemplo cuando un prostituto utiliza un preservativo, y éste puede ser el primer paso hacia una moralización, un primer acto de responsabilidad para desarrollar de nuevo la conciencia sobre el hecho de que no todo está permitido y de que no se puede hacer todo lo que se quiere”. Para los contradictores del papa Ratzinger, el preservativo es intrínsecamente malo independientemente de toda consideración de las circunstancias de su utilización.
—Se observa el mismo miedo ante toda consideración de les circunstancias en los casos excepcionales, por temor “tuciorista” que eso pueda debilitar la obediencia a la sana doctrina general…
No hay de ninguna manera que suprimir por “tuciorismo” la gradación entre las diversas faltas morales; ni tampoco, como se ha visto antes, declarar más grave el pecado que lo es menos bajo el pretexto de que está más difundido y que en consecuencia puede llevar socialmente a aceptar el primero. Es una forma de “consecuencialismo” social, tan detestable como el “consecuencialismo” individual condenado por la Veritatis splendor. Lleva a profesar una aberración manifiesta. No, la posición la más rígida no es la más segura.
—¿Pero entonces, según usted, es acaso verosímil que el Sínodo de los obispos pueda en definitiva representar un riesgo para la doctrina católica del matrimonio y de la familia confirmada por san Juan Pablo II y por Benedicto XVI?
Es totalmente inverosímil. El papa busca de manera manifiesta a que la justicia vaya acompañada por una aplicación más equitativa de la ley y que la firmeza de los principios vaya de la mano con la misericordia hacia las personas en su itinerario personal. Cuando santo Tomás, en el tratado de la justicia de la Suma Teológica, habla de la equidad, la llama siguiendo a Aristóteles epieikeia, palabra que en el Nuevo Testamento ha tomado el significado de moderación (Filip. 4, 5) y de indulgencia (1 Pe 2, 18), la presenta como “la parte más eminente de la justicia legal”. Y explica: “Porque los actos humanos sobre los que se promulgan leyes consisten en casos singulares y contingentes, variables al infinito, ha sido siempre imposible instituir una regla general que no tenga nunca un fallo. Por eso los legisladores, atentos a lo que sucede lo más a menudo, han promulgado las leyes en este sentido. No obstante, en ciertos casos, observarlas va en contra la igualdad de la justicia y contra el bien común que busca la ley”. En esos casos, dice santo Tomás, “el bien consiste, desatendiendo la letra de la ley, en obedecer a las exigencias de la justicia y del bien público”. Pertenece al Sínodo y al Santo-Padre decir hasta donde la Iglesia puede ir para ayudar a los casos particulares de los náufragos del matrimonio en una línea en la que la equidad se hace más netamente epieikeia, es decir según el Nuevo Testamento indulgencia.
—Usted ha sido sacerdote en parroquia, tiene la experiencia. ¿Sugiere usted que se tome en consideración algún caso concreto y específico que no podría beneficiarse de la equidad estricta de la cual acabamos de hablar?
Sí, pienso en una pareja de hecho en la cual uno de ellos ha estado antes casado, pareja con niños y con una vida cristiana efectiva y reconocida. Imaginemos que el que ha estado casada ha sometido su matrimonio a un tribunal eclesiástico, el cual ha concluido que le era imposible pronunciar la nulidad del matrimonio por falta de pruebas suficientes; pero esta persona está convencida que fue nulo a pesar de no tener manera de probarlo. Sobre la base de testimonios de su buena fe, de su vida cristiana y de su adhesión a la Iglesia y al sacramento del matrimonio, en particular por parte de un sacerdote experimentado que los acompañe, el obispo diocesano podría admitirlos a la eucaristía sin pronunciar una nulidad de matrimonio. Extendería así a estos casos una derogación excepcional, en consideración de su buena fe, que la Iglesia otorga ya a las parejas que se comprometen a vivir en continencia. Notemos que en este último caso se trata ya realmente de una epieikeia, pues si la continencia quita el pecado de adulterio, no suprime por eso la contradicción entre la ruptura conyugal con formación de una nueva pareja —con lazos afectivos y de vida común— y la eucaristía.
¿Qué otro caso quiere proponerme?
El otro tipo de situación es indudablemente más delicado. Es del de una pareja de hecho en la cual, después del divorcio y del matrimonio civil, uno de los dos o los dos han experimentado una conversión a una vida cristiana efectiva, de la cual puede dar testimonio entre otras personas un padre espiritual. Creen sin embargo que el matrimonio sacramental fue realmente válido y, si estuviese en su poder, intentarían reparar su ruptura, pues tienen una arrepentimiento sincero; pero tienen niños y además no se sienten capaces de vivir en continencia. ¿Qué hacer en este caso? ¿Acaso hay que exigir de ellos una continencia que, en su caso, sería temeraria sin un carisma particular del Espíritu?
En los dos casos particulares que ha examinado, me parece que no se trata de eludir la indisolubilidad del matrimonio. Al contrario, en estos dos casos específicos, las personas concernidas reconocen y aceptan la indisolubilidad del matrimonio sacramental, y no tienen ningún desprecio de la ley. No piden a la Iglesia que reconozca su pareja como matrimonio, sino solo que se les permita proseguir de la mejor manera posible su vida cristiana gracias a una vida sacramental más completa.
Para la Iglesia se trataría pues de una derogación excepcional a una disciplina tradicional, fundada desde luego sobre la altísima conveniencia sacramental entre eucaristía y matrimonio; derogación debida ya sea a una duda verosímil sobre la validez del matrimonio sacramental, ya sea a un retorno imposible, de facto pero no de deseo, a la situación matrimonial anterior al divorcio. En los dos casos, esta derogación intervendría en favor de una vida cristiana sólidamente establecida. Esta epieikeia de indulgencia iría en el sentido de la oikonomía de los Padres de la Iglesia entre los siglos I y V, antes de que la presión mundana de los emperadores bizantinos la hiciera extenderse en Oriente (concilio in Trullo, siglo VII) hasta admitir las segundas nupcias de los divorciados.
Estos casos dolorosos son relativamente poco frecuentes. Numerosos son en cambio los casos de parejas muy marginales con respecto a la vida cristiana y a la práctica religiosa que reclaman con gran clamor mediático un cambio de la disciplina de la Iglesia con respecto a los divorciados que se han vuelto a casar, sobre todo para que esta de un reconocimiento social a su nueva unión aceptando de una u otra manera el principio de la segundas nupcias después del divorcio. Legislar para ellos corriendo el riesgo de comprometer el sentido del matrimonio fiel e indisoluble, que muchas parejas cristianas viven no sin esfuerzo, sería alentar otra forma de es “mundanidad espiritual” que discierne tan acertadamente el Santo Padre. La definiría como “mundanidad religiosa”.
¿Cuál es pues la actitud pastoral adecuada?
“Tener el espíritu duro y el corazón tierno”. Esta palabra tan conocida de Jacques Maritain a Jean Cocteau, que habitaba la heroica Sophie Scholl en 1943 antes de ser ejecutada en una prisión nazi, me viene a la mente a propósito del Sínodo de los obispos. En relación con él quisiera desarrollar la metáfora de Maritain y decir a mi vez a los católicos: no tengamos ni el espíritu duro con un corazón seco, ni el corazón tierno con un espíritu blandengue. Pues son estas dos actitudes las que tienden hoy día a enfrentarse en una dialéctica estéril.
Por otra parte, parece que a algunos no les ha parecido necesario que el Sínodo recordase de nuevo los fundamentos, naturales y sobrenaturales, del matrimonio y de la familia, asumidos y enseñados por el Magisterio anterior.
Quizás los consideren como suficientemente conocidos a incluso demasiado machacados en el pasado; pero aparece en filigrana a través de lo que dicen que de hecho los encuentran molestos y “demasiado teóricos”, pues temen que entorpezcan la actitud compasiva de la conducta pastoral. Por esto se ven a su vez sospechados de favorecer el relativismo moral por los partidarios de la línea doctrinal. Estos a su vez son víctimas de otro miedo: que la Iglesia pueda abandonar esas verdades fundamentales. En el contexto confuso de nuestras sociedades occidentales, estas personas miedosas no quieren que el Magisterio, ocupado con la profusión de casos excepcionales, corra el riesgo de debilitar los principios en el alma de los fieles. Estos son por su lado sospechados por los otros de formalismo idealista y desconectado de la vida y del sufrimiento de los hombres.
***
Al final de nuestra entrevista, estamos plenamente de acuerdo sobre el hecho que el testimonio que los cristianos están llamados a dar es el del Dios de la verdad, del Misericordioso. “Hay que rezar al beato Pablo VI”, me dice Garrigues. “Que este beato Pontífice, prosigue, interceda para que los católicos salgan de esa dialéctica estéril, que procede de sus miedos opuestos, para avanzar hacia una sabiduría integradora y ordenadora en la cual, como dice el Salmo, “el amor y la verdad se encuentran, la justicia y la paz se abrazan”.
Me viene a la mente el fuego de Pentecostés, la efusión del Espíritu que nos hace vivir de nuevo los orígenes de la Iglesia. “Esta efusión transformó completamente a los discípulos: el miedo es remplazado por la valentía, la cerrazón cede el lugar al anuncio” ha dicho el papa Francisco después del Regina Caeli del último 24 de Mayo. “A nadie la madre Iglesia cierra la puerta en la cara, ¡a nadie! Ni siquiera al más pecador, ¡a nadie! Y esto por la fuerza, por la gracia del Espíritu Santo. La madre Iglesia abre, abre de par en par sus puertas a todos porque es madre”.

“La acogida”: tres experiencias, en el encuentro de Familia Dominicana en Torrent

Mesa Redonda "Experiencia de Acogida y Encuentro", organizada por la Familia Dominicana en el Convento de los dominicos de Torrent.

10 de junio de 2015

Encuentro FD Inmigración Islam
“O llegamos a España o llegamos al más allá. El que no quiera, que dé vuelta atrás”. Ese es el acuerdo al que un grupo de subsaharianos llegó hace diez años en algún lugar de las costas marroquíes. Entre ellos se encontraba Thimbo Samb, un senegalés que a día de hoy vive en Valencia y se gana la vida como actor. Tras nueve días de viaje, tocaron costa española en las Islas Canarias, y “llegó lo peor”, es decir, el internamiento en un CIE, “una cárcel”. Peor aún, una cárcel para alguien que no ha cometido ningún delito, exactamente aquello en lo que consiste un Centro de Internamiento de Extranjeros.
El testimonio de Thimbo Samb fue uno de los tres que centraron el último encuentro del curso de la familia dominicana valenciana, que se desarrolló el pasado sábado 6 de junio en el convento de los frailes dominicos de Torrent. El tema de este encuentro fue la acogida y contó con tres testimonios, dos a propósito de la inmigración africana y otro sobre la actual situación de la religión islámica.
La historia de Samb no acababa en el CIE. Cuando por fin salió de ahí se encontró solo en Barcelona, queriendo llamar a su casa y sin poder hacerlo a pesar de sus monedas, porque no sabía cómo utilizar una cabina telefónica. Después supo del trabajo en Valencia y le dijeron que el único inconveniente era que había que dormir en el río... Samb no sabía qué era un río, así que al llegar a la ciudad del Turia se llevó otro varapalo: tendría que dormir a la intemperie. A pesar de todas las dificultades que este joven ha pasado en sus diez años en España, ahora vive feliz y se siente afortunado: así se lo hizo saber a los que acudieron al encuentro de Familia Dominicana.
En la mesa redonda también intervinieron Alejando García y Amparo Pacheco. El primero es miembro del Grupo Espiga, y trabaja en 'La Casa Nueva', un albergue por el que pasan decenas de inmigrantes en Sagunto. Él es mucho más que un trabajador; aquellos que viven en 'La casa nueva' “pueden ser tus amigos”, afirmaba. También reflexionó sobre la necesidad de acabar con los continuos “cuadros de explotación” que viven muchos de quienes trabajan en el sector agrario y proceden de otros países. Entre realidades tan duras, sin embargo, también, aseguró García, pueden sacarse valiosas lecciones: “Aunque fracasen, cuando vuelven a su país, les ha servido, han aprendido, han madurado”, explicaba.

Violencia y religión

En otro tono y también de manera muy interesante surgió la experiencia de Amparo Pacheco. Valenciana, conversa al Islam, y profesora de la 'Cátedra Tres Religiones', tiene un hermano a punto de ordenarse sacerdote católico con el que, aseguró, es con quien mejor se entiende hablando de Dios. Habló de la religión islámica como una religión de paz y de siervos de Dios. Este mensaje puede parecer difícil de entender en el contexto actual, y por eso muchas preguntas fueron precisamente dirigidas a la realidad de violencia que nos llega a través de los medios de comunicación.
En este sentido, Pacheco, desde su fe musulmana, expresó que “puede ofender que dibujen esto. Pero que maten por dibujar esto ofende mucho más”. Quiso también resaltar que la imagen actual de los medios sobre el Islam no es la adecuada. “Por un 5% que se dedican a matar, se estigmatiza al 95%”, expresó.
Sin embargo, también defendió la necesidad de conocerse los unos a otros. “Para amarse hay que conocerse”, comentó. Así es posible convivir. Como ejemplo puso el de su mezquita, que este año fue objeto de unas pintadas en su contra pero que los mismos vecinos del barrio acudieron a borrar.

POESÍA ENVUELTA EN LUZ Y SONIDO. DOCE POEMAS A TERESA DE JESÚS LEÍDOS EN EL CLAUSTRO DEL CONVENTO DE SAN ESTEBAN Y BAJO “EL CIELO DE SALAMANCA”

Crear en Salamanca

LUIS FRAYLE DELGADO

10
SANTA TERESA
“Auriga de sandalias de seda y hierro”.
(Carmen Prada)
Es el Amor.
Que, insatisfecho tu corazón de niña adolescente,
en tu inquieta obsesión por las andanzas
metáfora en la aurora de tu vida,
invitas a tu hermano
a la incierta y luminosa aventura del martirio.
Es el Amor.
Que no encuentras en la tierra
y arrastra tu corazón a amor más alto
cual dama joven y mundana delante del espejo
busca al caballero
que calme los ardores de tu alma.
Es el Amor.
Que te deja vacía, amor humano,
y después de búsqueda incesante
te mete en los muros del convento
y comienzan a arder hasta las piedras
con la lumbre de tus ojos,
tu palabra ardiente
y el fuego que estalla dentro de tu pecho.
Es el Amor.
Que trasmites a todos los que amas,
hiere la carne de tu cuerpo
sufriendo sufrimiento interminable
hasta llegar al borde del abismo de la muerte
y aflige tu espíritu enigmático.
Es el amor.
Que no aguanta la vida regalada
y buscas una cruz donde clavarte
con ánimo indomable y cuerpo enfermo y débil
dejando volar tus sentimientos desatados
para alcanzar el más alto desposorio
con tu Cristo tan divino y tan humano.
Es el Amor.
Que te extasía
y te lleva a través del duro invierno
por las tierras y roquedas de Castilla
tragando el polvo que ahoga en los veranos
a fundar palomarcicos bien estrechos a tus monjas.
Es el Amor.
Que no da sosiego a tus anhelos
y, andariega, te lleva bajo la nieve y la tormenta
a dormir en el suelo y en la paja.
Y luego con tu amigo “el medio fraile”
fundadora de tantos monasterios,
carmelitas reformados.
Es el Amor.
Que entre dudas, luchas y trabajos
te levanta a gozos y deleites celestiales
en arrobos y visiones
que tu misma no aciertas a explicarnos,
mas nos dejas en tu “Vida” la memoria de tu alma.
Es el Amor.
Que derrochas en palabra lisa y llana
hablando y escribiendo sin descanso
mientras laboras con la rueca y las cazuelas
que vuelves oración contemplativa.
Es el Amor.
De mujer contumaz en tus propósitos.
Escalas, humilde y aguerrida,
de tu Castillo Interior la séptima Morada.
Y allí tu espíritu encuentra el “grandísimo silencio”
y la “paz” en el “centro de tu alma”
y sientes que en este arrobamiento “Dios solo te basta”.


JOSÉ AMADOR MARTÍN SÁNCHEZ


11


UNA PALOMA CRUZA LA MAÑANA
La ciudad es un corazón,
sus calles memoria de tus pasos.
El aire una paloma que cruza la mañana,
que acaricia con sus alas el batir de las horas,
la belleza de los días,
un sentimiento profundo de tu alma.
En tantos pasos,
en tanto polvo en los pies,
en tantas palabras que del papel se fueron
como aves peregrinas
he sentido la pasión de tu alma, tu desvelo,
por amar en Jesús, su rostro hermoso
fuente inagotable de agua viva
que recorrió tú corazón.
Quiero vivir la pasión que enamoró tu alma,
ser peregrino de tú quehacer inmenso,
sentir en la espesura de la sombra,
la luz eternizada de la aurora
de la llama viva que encendida arde
a la lumbre del sol.
De la cálida rosa de tu jardín
sentir el aroma que tu presencia irradia.
Recorrer las calles de esta ciudad hermosa
sentir en la espesura de la sombra,
la luz eternizada de la aurora,
corazón y memoria de tu sentir que es vida.
Quiero sentir… caminar… vivir un sueño
un encantamiento de pasión con la esperanza
de vivir sin vivir en mi que también es vivir
soñar, si soñar, también, es morir con Cristo.
La mañana es eterna en la ciudad o, acaso,
en la ciudad eterna la mañana es sueño,
cuando la luz esculpe las bóvedas del día
y las calles son memoria de tu vivir viajero.
Sol y lluvia, camino y polvo,
recorriendo los paisajes del alma
el corazón del hombre
cuando su sentir acalla la noche fría.
La ciudad del alma,
es la ciudad de Dios
entre el sol que desciende
de las Torres Sagradas
a los rincones oscuros de la verdad del día
hasta hacerse sentir del alma, resplandor callado
Fuiste, Teresa, Cautiva de amor,
Ardiente rosa de apasionada entrega,
junto a tú Amado, Señor, de corazón herido
y traspasado costado,
de callado sufrimiento,
sueño y presencia de tu sentir inmenso.
Acude a la contemplación, el rostro hermoso
en los desiertos del alma
poblados de aleteos de palomas que elevarán
su vuelo hasta tu corazón que iluminó mi noche.


Continuará...)
18 Alencart, Ricardo de Luis, prior de San Esteban y Sánchez Terrones
Alencart, Ricardo de Luis, prior de San Esteban y Sánchez Terrones




verapaz.jpg


Proyectos Acción Verapaz Centro


Ávila
Formación de jóvenes en Myanmar
Avila-Myanmar
La difícil situación política de este país ha provocado éxodos masivos de población que vive como puede, sin ninguna infraestructura de apoyo, ni educativa ni sanitaria ni de ningún otro tipo. Las misioneras de Santo Domingo han creado en estos campos de desplazados un Centro de acogida y formación para niños y jóvenes. El proyecto ayudará al sostenimiento de dicho Centro.
Beneficiarios: Jóvenes refugiados víctimas de la limpieza étnica
Contraparte: Misioneras de Santo Domingo
Solicitud: 1.800 €
Galicia
Ayuda a la escuela en el hogar ecológico para niños abandonados de Titanyen (Haití)
Galicia-Titanyen
Se estima que en la zona casi 2.000 niños de 0 a 12 años no van a la escuela por falta de medios. La Fundación Montesinos ha empezado a construir una escuela de 12 clases para 150 niños de 3 a 7 años. El proyecto cubrirá la alimentación durante un año.
Beneficiarios: 150 niños
Contraparte: Fundación Montesinos
Solicitud: 12.082 €

León
Formación de jóvenes en Bafia (Camerún)
Leon-Bafia
La ignorancia es una de las causas de las miserias que sufre África, particularmente en Camerún, y el motivo por el que los jóvenes se hunden fácilmente en el desánimo y la desesperanza, que los lleva a la depresión, prostitución, robo, etc. La formación está organizada en talleres con la participación de un equipo dispuesto a escuchar, participar, apoyar y formar. También está previsto formar un grupo de jóvenes animadores para que ellos también se inicien en la formación de otros jóvenes.
Beneficiarios: 100 jóvenes de Bafia con capacidad de liderazgo
Contraparte: Hnas Dominicas de la Anunciata
Solicitud: 5.667 €
Madrid – Oviedo
Construcción de dos aulas y pabellón en un preescolar. Chinandega (Nicaragua)
Madrid-Chinandega
Acción Verapaz trabaja en la zona de acuerdo con las familias mediante encuentros donde analizan las necesidades más apremiantes. El único preescolar existente creado por AV en 2011 con 40 niños se ha quedado pequeño para los 60 que acuden y otros que solicitan su entrada. En el mismo local llevan por la tarde un programa de apoyo escolar para 40 niños de 8 a 12 años. El proyecto amplía el preescolar con dos aulas más y construirá un salón de actos para las otras actividades, tanto escolares como de apoyo a la población para sus reuniones y actividades sociales.
Beneficiarios: 40 niños y niñas en edades entre los 8 y 12 años. 100 niños de preescolar y población implicada
Contraparte: Acción Verapaz Nicaragua
Solicitud: 19.971,24 €

Salamanca
Excavación de un pozo en Quisqueya (República Dominicana)
Salamanca-Quisqueya
Es éste un barrio (batey) de San Pedro donde viven los haitianos emigrados cultivadores de caña de azúcar. Los PFST se han trasladado con ellos para apoyar su difícil vida. Actualmente el batey no tiene acceso al agua. También quieren enseñarles a cultivar huertos para mejorar su alimentación. Para lograrlo este proyecto consiste en la construcción de un pozo con una bomba que será el comienzo de una vida más digna.
Beneficiarios: 15.000 habitantes de Quisqueya
Contraparte: Petits Frères de Sainte Thérèse de l’Enfant Jésus
Solicitud: 12.360 €
Sevilla
Captación de agua subterránea en Bainet (Haití)
Sevilla-Bainet
El proyecto consiste en la instalación de un sistema de sustracción de agua por absorción en la fuente “Nan Piton”, formado por dos tanques, uno de recepción y otro de distribución mediante dos bombas. Posteriormente una red de distribución la llevará a los puntos de abastecimiento. Ésta es la única fuente que suministra la amplia zona, algunas poblaciones deben recorrer 4 km. para acceder a ella. El transporte por caminos accidentados con el peso de los barriles o cubos acaba muchas veces en accidentes. Las comunidades participarán en la construcción.
Beneficiarios: habitantes de Kagout, Terre Rouge y comunidades aledañas (Bainet) y usuarios del Mercado principal.
Contraparte: AUSAPDE
Solicitud: 8.861 €

Torrelavega
Crianza de gallinas ponedoras en la Alta Meseta Central (Haití)
Torrelavega-Haiti
Dos estaciones, lluvia y sequía, sólo permiten la ganadería como actividad para la subsistencia y generar ingresos. Este proyecto tiene la ventaja de ser de fácil gestión y con resultados a corto plazo para que estas familias, muy pobres, sean capaces de saber llevarla y sacar adelante sus beneficios. Se prevé ir aumentando las familias a medida que se aumente el número de ponedoras, a partir de estas primeras, como para que al tercer año del proyecto sean 500 las familias beneficiarias.
Beneficiarios: 500 familias campesinas
Contraparte: Petits Frères de Sainte Thérèse de l’Enfant Jésus
Solicitud: 6.014,13 €
Valencia
Compra de materiales escolares para cuatro escuelas comunitarias en Beausejour (Haití)
Valencia-Beausejour
La zona cuenta con muy pocas escuelas dignas de este nombre, lo que explica la tasa tan elevada del 65% de analfabetismo y de delincuencia juvenil. Los niños que tienen la suerte de ir a la escuela no están provistos de materiales escolares adecuados como libros, cuadernos, bolígrafos, instrumentos para geometría, etc., lo que contribuye en gran manera al fracaso escolar. El material escolar aportado se logrará sumando la contribución de los padres y será controlado por un comité formado con maestros miembros de la asociación para su cuidado y duración.
Beneficiarios: 400 alumnos de las escuelas
Contraparte: UNOPDEB
Solicitud: 13.081 €

Valladolid
30 máquinas de coser para costureras en Les Anglais (Haití)
Valladolid-Haiti
El proyecto trata de favorecer el autoempleo a estas mujeres que ya se han graduado en Alta Costura en el centro de formación profesional y, después de todo su esfuerzo, no tienen medios para desarrollar sus capacidades.
Beneficiarios: 30 mujeres costureras
Contraparte: MOFEDA
Solicitud: 19.200 €





http://jubileo.dominicos.org/kit_upload/image/Jubileo/penjubileo.jpg

Programa oficial del Jubileo Dominicano en España

DOMINGO, 21 DE JUNIO, ÚLTIMA SESIÓN SOBRE EL SACRAMENTO DEL PERDÓN

Perdon.jpg

ARCHICOFRADÍA DEL ROSARIO San Esteban celebrará el 13 de junio la bendición de la imagen de Nuestro Padre Jesús de la Redención Es obra del imaginero sevillano José Antonio Navarro Arteaga http://salamancartvaldia.es/upload/img/periodico/img_323025.jpg El imaginero Navarro ArteagaSALAMANCArtv al DÍA
La imagen de Nuestro Padre Jesús de la Redención, de la Archicofradía del Rosario de Salamanca, será bendecida el día 13 de junio a las 17 horas en la Iglesia de San Esteban. La gubia del prestigioso imaginero sevillano José Antonio Navarro Arteaga ha hecho posible "que podamos contemplar la imagen de nuestro titular" y al terminar la ceremonia la imagen quedará expuesta en el solemne besapiés. La talla formará parte del conjunto escultórico de la Sagrada Cena. Dicho grupo escultórico "se irá realizando poco a poco, teniendo en cuenta la disposición económica de la hermandad".
http://salamancartvaldia.es/upload/img/periodico/img_323023.jpg
SOLENME BENDICIÓN. 13 de junio a las 17 h en el Convento de San Esteban La Archicofradía del Rosario de Salamanca, tiene la enorme alegría de anunciar la Solemne Bendición, de la Imagen de Ntro. Padre Jesús de la Redención en la Institución de la Eucaristía. Para la ciudad de Salamanca.
La gubia del prestigioso Imaginero Sevillano, José Antonio Navarro Arteaga a hecho posible que podamos contemplar la imagen de nuestro titular.
Dicha celebración tendrá lugar DM el próximo día 13 de junio de 2015 a las 17:00 horas en el Convento de San Esteban.
Al terminar la ceremonia la Sagrada Imagen quedara expuesta en solemne besapie.
La talla del Ntro. Padre Jesús de la Redención formará parte del conjunto escultórico de la Sagrada Cena. Dicho grupo escultórico se ira realizando poco a poco, teniendo en cuenta la disposición económica de la hermandad.
Desde aquí nos gustaría invitar a todos los cofrades y a toda Salamanca a compartir este día tan especial. Recibid un Saludo en Madre de Dios del Rosario.
Oh Dios, tú habitas en una luz inaccesible y nos has amado tanto que, siendo invisible, te nos has hecho visible en Cristo; mira con bondad a estos hijos tuyos, que han dado forma a esta imagen de tu Hijo, y haz que al venerarla, se vayan transformando en la realidad que esta imagen representa.
Titulo
Fecha Inicio:13/06/2015 21:16:20
Fecha Fin:13/06/2015 21:16:20
Lugar:CONVENTO DE SAN ESTEBAN

CORPUS DOMINICANO La Real y Pontificia Archicofradía Sacramental de María Santísima Madre de Dios del Rosario y San Pío V de Salamanca celebrará, el próximo Domingo 149 de junio de su tradicional Corpus Dominicano.
La celebración tendrá lugar en la Iglesia de San Esteban, comenzando a las 19:30h con el rezo del Santo Rosario seguido de la Santa Misa y posterior Procesión Sacramental por el Claustro de los Reyes.
http://www.ssantasalamanca.com/rosario/images/carteles/Corpus_Dominicano.jpg
Fecha Inicio:14/06/2015 19:30:22
Fecha Fin:14/06/2015 22:30:22
Lugar:IGLESIA DE SAN ESTEBAN

Llavero-USB para el Jubileo de laicosop

Con este sencillo y práctico recuerdo, la Fraternidad Laical de Santo Domingo de Atocha quiere conmemorar la celebración del Jubileo Dominicano 2016.

Se trata de un llavero-memoria USB de 8 GB de capacidad con unos simpáticos dibujos de Santo Domingo, por un lado, y de Santa Catalina de Siena, por el otro. Acompañan, a los pies de los dos santos, las leyendas “JUBILEO OP” y “LAICOS OP” respectivamente.
La iconografía elegida para Santo Domingo quiere resaltar el carácter itinerante de su predicación, como una invitación a todos los dominicos y dominicas a renovar en este Jubileo nuestra vocación al servicio de la Palabra por encima de todo lo accesorio y secundario.
En la iconografía de Santa Catalina, laica dominica, se ha querido resaltar un aspecto poco frecuente en su representación: el ser Doctora de la Iglesia. Ello se debe a que su magisterio fue reconocido de manera oficial en época reciente.
El llavero-USB de laicosop está fabricado en PVC flexible y se puede conseguir por 15 euros solicitándolo a través del correo electrónico.
Medidas en milímetros: 70 alto, 22.6 ancho y 9.5 grosor.

Del 6 de julio de 2015 al 12 de julio de 2015
Curso de Comunicación y Predicación. Convento San Pedro Mártir (Avenida de Burgos 204, Madrid). http://www.dominicos.org/kit_upload/image/Destacados/2015/Destacado_Asamblea_Predicacion_2015.jpg Materias y profesores:
"TÉCNICAS Y ESTÉTICA DE LA COMUNICACIÓN"
César CID GIL y Santiago LÓPEZ NAVIA
"LA TRANSMISIÓN DEL MENSAJE RELIGIOSO EN EL MUNDO ACTUAL"
Manuel María BRU ALONSO
"NATURALEZA Y RASGOS DEL MENSAJE RELIGIOSO CRISTIANO"
Francisco José RODRÍGUEZ FASSIO, OP
"HERMENÉUTICA Y USO DE LA BIBLIA EN LA PREDICACIÓN"
Miguel de BURGOS NÚÑEZ, OP
"LA BIBLIA EN LA CATEQUESIS"
Gloria CAÑADA MILLÁN, OP y Miguel Ángel MEDINA ESCUDERO, OP
"HOMILÉTICA: TEORÍA Y PRAXIS"
José RAMOS DOMINGO
"ANIMACIÓN LITÚRGICA"
Juan Antonio ESPINOSA BOTE
LUGAR:
Convento San Pedro Mártir.
Avenida de Burgos 204, 28050 Madrid
Inscripciones:
Más información: Descargar tríptico informativo
Horario: 9:00-14:00 h y 16:30-20:00 h.
Contacto e inscripciones:
Marcos Ruiz: ruizarbeloa@gmail.com
Fijo: 91 3044109

a.jpg
b.jpg

Ejercicios espirituales y Encuentros de oración


Grupo de personas en oración durante ejercicios espirituales

Ejercicios Espirituales y Encuentros de Oración 
Año 2015

La Casa de Espiritualidad de la Virgen del Camino contribuye con sus renovadas instalaciones a un clima de tranquilidad y oración. A continuación te ofrecemos la programación de actividades para este año.

Inscripciones

Puedes inscribirte en las actividades poniéndote en contacto con nosotros por:
Teléfono: 679 332 768 - 650 552 201 -  987 300 987 - 987 300 001
E-mail: vcaminod.es@dominicos.org

EJERCICIOS ESPIRITUALES 
(Seglares, Sacerdotes, Consagradas/os)

MesDíasDescripción
Marzo-Abril29/III-05/IV
(Semana Santa)
La respuesta al amor de Dios es hacer su voluntad
Fr. Argimiro Cid, O.P.
Junio19-26Vivir el hoy de Dios
Fr. Francisco José Rodríguez Fassio, O.P.
Julio03-10¿También vosotros queréis marcharos? (Jn 6,67) 
¿Por qué permanecemos con Jesús?
Fr. Manuel F. Santos, O.P.
Julio13-20No andéis preocupados por vuestra vida (Mt 6, 25)  
Providencia, gratuidad, responsabilidad.
Fr. Fernando Vela López, O.P.
Julio23-30Alegraos en el Señor (Flp 3, 1)  
Fr. José María Viejo, O.P.
Agosto04-11Las miradas de Jesús en el Evangelio
Fr. Vicente Botella, O.P.
Agosto19–26Seguimiento y felicidad
Fr. César Valero, O.P.
Septiembre01-08Si no soy amor, no soy nada (Cor 13, 1-13)
Fr. José Antonio Segovia, O.P.




ENCUENTROS DE ORACIÓN   
(Seglares, Sacerdotes, Consagradas/os)

Escuela del silencio

MesDíasDescripción
Junio 11-14Entrenamiento intensivo de oración silenciosa

Escuela de contemplación

MesDíasDescripción
Diciembre11-13Espera en intenso silencio. Experiencia de interiorización.
Fr. Jaime Boada i Rafí, O.P.

CAMINO DE DOMINGO 2 CARTEL A3_3octubre.jpg
aaa.jpg



horarios.jpg
La Ediorial san Esteban en la Feria del Libro de Madrid Se encuentra en la caseta nº 340

02/06/2015
La Editorial san Esteban se encuentra presente en la feria de Madrid. Una selección de sus obras se puede encontrar en la caseta 340 (caseta del Gremio de Editores de Castilla y León). La feria es una ocasión de acercar nuestras producciones al público y dialogar con ellos sobres sus búsquedas e intereses. La Feria del libro de Madrid celebra este años su 74 edición y  se ha convertido en uno de los grandes acontecimientos culturales del país



Emilio Lledó: Premio Princesa de Asturias La Editorial san Esteban cuenta con una obra sobre su pensamiento

20/05/2015
El pensador y filósofo Emilio Lledó ha sido galardonado con el premio Princesa de Asturias en su sección de humanidades. A sus 87 años de edad es uno de los pensadores españoles con más eco internacional. Sus estudios se han centrado sobre todo en la cuestión del lenguaje. En la Editorial san Esteban se ha publicado el estudio "Emilio Lledó: una filosofía de la memoria", obra del profesor Joaquín Esteban Ortega. La Editorial san Esteban se alegra por este nuevo reconocimiento y felicita a D. Emilio Lledó.
Se puede consultar la obra pinchando en el enlace siguiente;


Emilio Lledó: una filosofía de la. memoria.

Libro impreso Autor: Joaquín ESTEBAN ORTEGA
Colección: ALETHEIA


Precio: 15,00 €
Páginas: 312 págs.
Año: 1997
ISBN: 84-8260-042-7


Lógica de la creencia. Una filosofía (tomista) de la religión.

Libro impreso Autor:
Colección: ALETHEIA
Esta obra presenta la filosofía de la religión de corte analítico de manera sistemática y completa. Es también y, quizá ante todo, tomista, en la medida en que pone a Tomás de Aquino en diálogo con estas aportaciones anglosajonas. Muchos lectores se quedarán sorprendidos de cuánto y cuán bien utilizan los filósofos analíticos de la religión al Aquinate. Hay en este libro muchas cosas que dan que pensar.



El día sin noche. La pascua en los himnos del Apocalipsis.

Libro impreso Autor: José Manuel ALCÁCER
Colección: ALJIBES
La cristología es el centro de la obra, del que parte y al que se dirige. Es Jesucristo resucitado el que domina el transcurso de la historia desde el primer versículo hasta el último ("¡Ven Señor Jesús!" 22,20). Él es el artífice de la Nueva Alianza de la que ha brotado la Iglesia, nuevo Pueblo de Dios sacerdotal y real, que vive de su Palabra y cuya razón de ser es el re-conocimiento del Dios Salvador, manifestado en la celebración jubilosa de la Pascua, en la que renueva su Éxodo con Cristo, de este mundo al Padre.

Tomás de Aquino orante. Biblia, poesía y mística.

Libro impreso Autor: Paul MURRAY
Colección: BIBLIOTECA TOMISTA
Un aspecto de la vida y obra de santo Tomás de Aquino a menudo olvidado, es su dimensión orante y contemplativa. Hoy a santo Tomás de Aquino, Doctor de la Iglesia, se le considera casi en exclusiva como teólogo y filósofo especulativo. Pero el Aquinate fue, ante todo, un Maestro de la Biblia (Magister in Sacra Pagina). Y es en ese quehacer donde encontramos un marcado carácter místico derramado en una poesía expresiva y delicada. Este libro explora el acercamiento de santo Tomás a la oración y su enseñanza sobre el tema en sus comentarios a los Salmos y a los Escritos Paulinos. También pone al alcance de los lectores nuevas traducciones y textos trabajados recientemente por la Comisión Leonina.


Precio: 22,00 €
Páginas: 339
Año: 2015
ISBN: 978-84-8260-316-2

Caminando hacia un nuevo vicariato de la Orden de Predicadores en el Caribe
http://cidalc.op.org/wp/wp-content/uploads/2015/06/republica-dominicana.jpg
Desde el 11 al 15 de Mayo los frailes dominicos del Vicariato de la República Dominicana (Provincia de España) y del Vicariato de Cuba (Provincia de Andalucía) se reunieron en La Habana para seguir caminando en el proceso de unificación de ambos vicariatos para el próximo año 2016. Acompañando esta Asamblea Conjunta estuvieron presentes Fray Miguel del Burgos, Prior Provincial de Andalucía, y Fray Javier Carballo, Prior Provincial de España.
Los diálogos fraternos se centraron en torno a los documentos que serán presentados al primer Capítulo Vicarial del próximo año 2016 en el que nacerá un nuevo vicariato. Los documentos giran sobre cuestiones de Vida y Misión, Centros de Estudios, Pastoral Vocacional, Jubileo, Formación, Economía, Parroquias, y sobre los nuevos Estatutos de Vicariato que serán presentados al Capítulo Provincial de la futura provincia Hispania para que a su vez los presente al Maestro de la Orden para su aprobación.
Las dos grandes decisiones deliberativas que se hicieron en esta Asamblea Conjunta fueron, en primer lugar, el posible nombre que llevará el futuro vicariato (Vicariato Fray Pedro de Córdoba en Cuba y República Dominicana) con el que se quiere hacer memoria del Prior de la primera comunidad de frailes dominicos en América; y, en segundo lugar, se decidieron las fechas y el lugar del primer Capítulo vicarial (Mayo del 2016 en Santo Domingo – República Dominicana) en el que será instituido el primer Vicario provincial por el Provincial de la futura Provincia Hispania. Por último, los frailes de futuro Vicariato Fray Pedro de Córdoba redactaron una carta articulada en torno al agradecimiento, la esperanza y la comunión y colaboración dirigida a los frailes de la futura Provincia Hispania que puede leerse aquí.
Esta semana de diálogo y encuentro entre los hermanos fue sazonada con 2 grandes eventos. La Profesión Solemne el día 12 de Mayo en el Convento de San Juan de Letrán de La Habana de Fray Raisel Matanzas Pomares OP, fraile cubano que se encuentra finalizando sus estudios de Teología en la República Dominicana. El 15 de mayo, último día de la Asamblea Conjunta de los dos vicariatos, como acto Jubilar por la aprobación de nuestra Orden tuvo lugar la conferencia de Fray Jean Jacques Pérennès OP en el Aula Mayor de Colegio Universitario de San Jerónimo de La Habana (primera universidad de Cuba fundada por los frailes dominicos) que contó con la presencia de Mons. Alfredo Petit, Obispo auxiliar de La Habana, miembros de la oficina de asuntos religiosos del Partido Comunista de Cuba, autoridades del cuerpo diplomático presente en Cuba y  distinguidos miembros de la sociedad habanera.
Fray José Rafael Reyes González OP
Convento de San Juan de Letrán de La Habana


MISIONERAS DOMINICAS DEL ROSARIO VISITAN EL CONVENTO DEL SANTISIMO ROSARIO

http://static.wixstatic.com/media/b0853a_f07df4a6e8ae487ea96ee83685fc7b00.jpg_srb_p_937_527_75_22_0.50_1.20_0.00_jpg_srb
Un grupo de catorce hermanas Misioneras Dominicas del Rosario que se encuentran eventualmente en Lima realizando un curso de acompañamiento en la CONFER, se dieron cita ayer domingo 31 de mayo, en el Convento del Santísimo Rosario de Lima para venerar las reliquias de nuestros santos peruanos y compartir con los hermanos conociendo el primer convento de la Provincia.
Luego de participar en la eucaristía celebrada por Fr. Javier Abanto, las hermanas fueron guiadas por las instalaciones del Museo y finalmente compartieron un ágape con Fr. Luis Enrique Ramírez, Fr. Javier Abanto, Fr. Omar Arias y Fr. Juan José Salaverry.
Las hermanas que llegaron de distintos países: Filipinas, Congo, India, Chile, Perú, Angola, y Mozambique entonaron algunos cantos y bailaron según las usanzas de sus países natales.

Fray Bruno Cadorè compartiendo con nuestros hermanos de Radio Quillabamba

https://scontent-mad1-1.xx.fbcdn.net/hphotos-frc3/v/t1.0-9/p180x540/10445570_379430485595191_1220482658201279455_n.jpg?oh=a705c31c5bdd87c3e48fb5674eb949b5&oe=55FB0AA3

XII Congreso de la Revista OPtantes editada por los frailes estudiantes dominicos de la Provincia San Luis Bertrán de Colombia.










Los Mártires de la Abadía de Westminster 

https://lh5.googleusercontent.com/-tu08WG60XXI/AAAAAAAAAAI/AAAAAAAAABs/XlyaIQccrDo/photo.jpg

por Francisco Quijano
 


Con motivo de la beatificación de Monseñor Óscar Romero el pasado mayo, rescato el homenaje que la Iglesia de Inglaterra le rindió el 8 de julio de 1998 junto con otros nueve mártires cristianos del siglo XX.
Fue una celebración en honor de Maximiliano Kolbe, Manche Masemola, Janani Luwum, Isabel Fiódorovna, Martin Luther King, Óscar Romero, Dietrich Bonhoeffer, Esther John, Lucian Tapiedi, Wang Zhiming, cuyas estatuas fueron colocadas en unos nichos vacíos desde la Edad Media en el Pórtico Occidental de la Abadía de Westminster. Testigos de distintas confesiones cristianas que fueron víctimas de persecuciones religiosas y de regímenes opresores en los cinco continentes.
Las estatuas fueron develadas por la Reina Isabel II, acompañada por el Duque de Edimburgo, el Arzobispo de Canterbury, Dr. George Carey, el Arzobispo de Westminster, Cardenal Basil Hume, y por otros pastores y representantes de varias iglesias cristianas.
Estos diez mártires representan las centenas de miles, si no millones, de víctimas del siglo XX. La Iglesia Católica Romana también recordó a estos mártires en una multitudinaria celebración ecuménica en el Circo Massimo de Roma, presidida por Juan Pablo II, el domingo 7 de mayo de año 2000.
El Reverendo Anthony Harvey, vicedecano de la Abadía de Westminster, lo expresó así: “Siempre ha habido momentos en la historia del cristianismo en los que alguien, en alguna parte, ha muerto por no condescender con los poderes de la opresión, la tiranía y la no creencia. Pero nuestro siglo, el más violento que registra la historia, ha suscitado una lista de mártires cristianos que excede con mucho cualquier época anterior”.
El criterio para declarar mártir a una persona es que dio testimonio de Jesucristo hasta la muerte. Con el tiempo, el significado de la palabra “mártir / testigo” se ha ampliado para incluir no solo a quienes mueren por odio a la fe, sino también a quienes mueren por odio a caridad para con el prójimo. Muchos de los mártires modernos han entregado sus vidas por los demás, con actitudes de no violencia frente a poderes ingentes.
A lo largo de la historia ha habido innumerables víctimas de la intolerancia y del fanatismo de raíces religiosas, ideológicas, nacionalistas, étnicas. Las víctimas cristianas, a quienes llamámos mártires, nos recuerdan también a estas personas que han sido víctimas por sus creencias o por otros motivos que no justifican estos crímenes.
Los mártires representados en el Pórtico Occidental de la Abadía de Westminster son:
Maximiliano Kolbe, polaco, sacerdote franciscano de la Iglesia Católica Romana, fue asesinado en el campo de concentración de Auschwitz el 14 de agosto de 1941. Maximiliano solicitó ser ajusticiado en vez de un prisionero que había sido sentenciado a muerte en represalia por otro prisionero que había escapado.
Manche Masmeola participaba como catecúmena de la Iglesia Anglicana para recibir el bautismo. Sus padres se opusieron a su conversión. Fue asesinada en 1928 por su madre a los 16 años antes de recibir el bautismo. Ella había dicho que sería bautizada con su propia sangre. En 1969 su madre se convirtió al cristianismo.
Isabel Fiódorovna, Gran Duquesa de Rusia, nació en el Ducado de Hesse-Darmstadt, fue asesinada por los bolcheviques en 1918. Ella, así la llamaban, estuvo casada con el Gran Duque Sergio, hijo del Zar Alejandro II. Tras el asesinato de su esposo en 1905, se deshizo de sus joyas, fundó un convento con un hospital y un orfanatorio para ayudar a los pobres. De la Iglesia Evangélica Luterana había pasado a la Iglesia Ortodoxa Rusa en 1891.
Janani Luwum fue un arzobispo anglicano de la provincia metropolitana de Uganda, Ruanda, Burundi y Zaire. En 1977, Luwum entregó a Idi Amin una nota de protesta contra las muertes arbitrarias y las desapariciones; el 16 de febrero fue arrestado y acusado de promover un golpe de estado, murió asesinado ese mismo día junto con los ministros Erinayo Wilson Oryema y Charles Oboth Ofumbi.
Martin Luther King, muy conocido pastor de la Iglesia Bautista y líder del movimiento por los derechos civiles de los afroamericanos, fue asesinado en Memphis el 4 de abril de 1968.
Oscar Romero, arzobispo católico romano de San Salvador fue asesinado el 24 de marzo de 1980, por su compromiso en favor de los pobres.
Dietrich Bonhoeffer, teólogo y pastor luterano, participó en el movimiento de resistencia al nazismo. Fue ahorcado en la campo de concentración de Flossenbürg, Bavaria, el 6 de abril de 1945.
Esther John, antes Qamar Zia, nació en 1929 en una familia islámica en la India. Siendo adolescente leyó al profeta Isaías y decidió hacerse cristiana. En 1947 su familia emigró a Pakistán, años después los abandonó, cambió su nombre y se dedicó a la enfermería y al anuncio del evangelio. La encontraron asesinada en su casa de Chichawatni el 2 de febrero de 1960.
Lucian Tapiedi fue un profesor anglicano de Papúa-Nueva Guinea, murió durante la invasión japonesa a la isla en 1942 junto con otros ocho clérigos, maestros y misioneros médicos. Irónicamente, Lucian no fue asesinado por los japoneses sino por un nativo de tribu Orokaiva, llamado Hivijapa, que después se convirtió al cristianismo.
Wang Zhiming fue un pastor cristiano de la tribu Miao en la provincia de Yunnan, China. Durante la Revolución Cultural (1966-1976) él, su esposa y sus hijos fueron arrestados. En 29 de diciembre de 192, Zhiming fue ejecutado un estadio ante 10000 espectadores, muchos de ellos cristianos que protestaron ante el fiscal.

Junio 2015

Dadles vosotros de comer

Editado por

Sor Gemma Morató Sor Gemma Morató
DarMedito sobre el Evangelio de San Marcos en su capítulo 6 sobre la multiplicación de los panes y en la invitación que Jesús hace a sus discípulos: “Dadles vosotros mismos de comer”. Señor, ¿cómo voy a ser capaz de alimentar toda esta multitud de gente? No tengo tantas posibilidades. Continúo leyendo y observo que uno de ellos dice que tienen cinco panes y dos peces. Pero qué es esto para el gentío que se ha reunido allí. Sin embargo Jesús con lo poco que tienen hace milagros. Es el milagro de compartir.
Es el milagro de la buena disposición del corazón, de no quedarse encerrado en uno mismo y buscar medios para socorrer al necesitado. Yo tengo poco pero puedo ingeniarme a buscar que otros pongan también de lo suyo en la mesa de la fraternidad.
El Hijo de Dios nos da ejemplo, él se entrega por completo nos ofrece su amor incondicional, sin esperar ser correspondido Es el milagro del amor entregado sin medida. Acogiendo la Palabra de Dios nos hace capaces de acoger a los que acuden a nosotros. De todos aquellos que esperan un gesto, una sonrisa, una visita, un sinfín de cosas que exigen de nosotros el olvido de sí. Estoy cansado pero este pobre espera que le haga una diligencia que él no puede hacer porque está impedido. ¿Me negaré a su petición? Jesús me dará la fuerza necesaria para poder superar mi fatiga y acudir al otro con generosidad. Y por añadidura seré feliz porque nada hace tan feliz como hacer felices a los demás. Texto: Hna. María Nuria Gaza.

Nazaret o vivir el seguimiento en lo cotidiano

http://nihilobstat.dominicos.org/imagenes/blog/mgelabert.jpg

Nihil Obstat

Blog de: Martín Gelabert Ballester, OP miércoles, 10 de junio de 2015 
¿Es posible, a partir de la geografía, hacer espiritualidad? Eso es lo que hizo, en unos Ejercicios, predicados pocos días antes de su muerte, Gabriel Marcelo Napole. Por ejemplo: ¿qué podemos aprender de Nazaret, ese pequeño pueblo en el que Jesús vivió la mayor parte de su vida? En los tiempos bíblicos era un pueblo desconocido e insignificante. En los pequeños pueblos de entonces, las casas no tenían puertas y, menos, cerraduras, sino cortinas. Nazaret era un pueblo muy vulnerable. Jesús era conocido como “el nazareno”. Algo que probablemente no era, de entrada, ningún elogio, pues de Nazaret se decía que no podía salir nada bueno.

En Nazaret, Jesús no hizo cosas extraordinarias, como quisieran hacernos creer los evangelios apócrifos. Nazaret era un lugar dónde todos se conocían y, a lo mejor por eso, no se fiaban demasiado unos de otros. Los de su pueblo, dice Mc 6,3, “se escandalizaban” de Jesús. Y, sin embargo, fue allí, en las costumbres y en la vida diaria de este lugar, donde Jesús descubrió la presencia de Dios: allí el niño crecía en edad, en sabiduría y en experiencia de Dios. Nazaret es el tiempo del crecimiento y de la maduración. De ahí la pertinencia de la pregunta de fray Gabriel Napole: ¿qué evoca Nazaret para nuestro seguimiento de Jesús?

Nazaret evoca el día a día del seguimiento. En el seguimiento de Cristo los acontecimientos extraordinarios son poquitos. Llega un momento en que la vida cristiana parece muy rutinaria. Nazaret evoca el seguimiento de Jesús en lo cotidiano y ordinario de la vida. Nazaret es la escuela en la que se aprende a descubrir la presencia de Dios en la vida “tal como es”, en el trabajo de la gente y en los rostros de los que están a nuestro lado. El ruido de la calle puede ser tan eco de Dios como el silencio de un monasterio. En el lugar donde nos toca vivir es dónde el Señor nos ama y nos invita a descubrirle.

Pero también es una alerta contra la rutina. Cada día hay que renovar el seguimiento. Por eso Nazaret es el lugar de la perseverancia, de decir cada día un nuevo sí al Señor. En lo cotidiano hay momentos favorables y momentos de crisis. Pero lo cotidiano es la oportunidad para mirar hacia adelante. Después de cada noche viene un amanecer. No todo se acaba en el hoy, no todo se explica con el presente. Nazaret puede ser un lugar de esperanza, desde donde otear un futuro mejor.

Nazaret evoca también la comunión dentro de la diversidad. En un pueblo pequeño la gente es tan distinta como en una gran ciudad, pero la vulnerabilidad del pueblo nos hace cobrar conciencia de la necesidad que tenemos unos de otros. Un pueblo pequeño se lleva entre todos, y los problemas de uno afectan a los otros. Dos debilidades se hacen fuertes cuando se apoyan mutuamente. Dos soledades que se unen crean comunión. En el seguimiento de Cristo nos hacemos vulnerables, no porque seamos débiles, sino porque nos abrimos los unos a los otros. Es la vulnerabilidad del amor.

VÍDEO DE HOY:


Sta. Catalina de Siena: un modelo de siempre para mujeres de ahora

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario